2022 ha sido un año lleno de avances en la industria latinoamericana del juego, especialmente en países de Sudamérica. Lo que se suponía que iba a ser el momento clave de países como Brasil y Chile, terminó siendo la consolidación de mercados como Argentina y Perú.
SBC Noticias analiza qué mercados son los más atractivos para seguir de cerca en 2023, tanto por desarrollos como por maduración, en la última entrega del especial de fin de año.
Perú
El mercado peruano de juegos es uno de los más establecidos en Latinoamérica. Sin embargo, la regulación del juego online llegó recién a mitad de 2022, por lo que la industria aún tiene mucho camino por recorrer.
Con 45 mil puestos de empleo formales, y en camino a conseguir los 92 mil con los que contaba antes de la pandemia, Mincetur ha encabezado la actualización del juego en el país, que se encuentra en una situación política y social delicada.
Para 2023, habrá que acompañar de cerca todas estas situaciones y analizar de qué forma y cuánto afectarán a la industria del juego, así como a la implementación, desarrollo y maduración de la industria online.
Argentina
Con mercados ya funcionales y con las empresas más importantes presentes, tanto la Ciudad de Buenos Aires como la Provincia de Buenos Aires se asoman como dos de las jurisdicciones más atractivas de Sudamérica.
La afinidad por el deporte, específicamente el fútbol, el interés en las apuestas y un alto porcentaje de penetración de internet hacen que estos dos territorios continúen siendo el foco de atención para múltiples empresas del juego.
Más allá de Buenos Aires, provincias como Córdoba y Mendoza ya han realizado el arduo trabajo de crear un marco regulatorio adecuado para sus territorios, y solamente necesitan el visto bueno para continuar con sus procesos o lanzar sus mercados.
Estas iniciativas probablemente sean replicadas en otras provincias a lo largo de 2023, a pesar de que el año entrante será uno electoral en Argentina, por lo que se espera una intensa actividad legislativa.
Colombia
A pesar de serlo, hablar de que Colombia es el ejemplo de la región puede considerarse como algo repetitivo. Con una amplia oferta de juegos y verticales, en 2023 el país continuará a la vanguardia de la industria.
Con casi todas —por no decir todas— las modalidades aprobadas y en funcionamiento, ¿qué puede hacer Colombia para continuar innovando? El desafío será proveerle a Latinoamérica la estabilidad que no puede ver en otros sectores.
La historia regional es larga y compleja, pero Colombia pareciera poder simplificar todos los procesos alrededor de una industria que propone beneficios y seguridad para sus clientes. La tarea para 2023 será preguntarse cuáles son los siguientes pasos y de qué forma pueden perfeccionar un producto que ya funciona y sobresale.
Uruguay
El país rioplatense lleva varios años intentando regular el juego online. A mediados del tercer trimestre de 2022, se retomaron los debates que habían comenzado a fines de 2021 para discutir de qué forma se podía implementar este mercado.
Para distintos especialistas de Uruguay, el mercado podría generar entre 45 y 55 millones de dólares al año en ingresos brutos.
Uno de los puntos centrales del proyecto que espera un voto de la Cámara de Diputados es que, para poder acceder a una licencia online, es necesario contar con una licencia de casino previa. Es decir, el mercado estaría limitado para aquellas empresas que ya cuentan con una oferta de juego.
La mayor ventaja de Uruguay es contar con un mercado pequeño, por lo que aprovechar a los operadores físicos actuales puede llegar a ser considerado como un plus de cara al 2023 para poder implementar el mercado online y sus respectivas reglas para cuidar a sus jugadores.
Brasil
Los análisis alrededor del mercado brasileño son muchos y variados, pero hay uno solo en el que todos pueden ponerse de acuerdo: Brasil desaprovechó una gran oportunidad para comenzar el 2023 con un mercado de apuestas y juego online en funcionamiento.
Los interesados deberán retomar la lucha para conseguir votos en las distintas comisiones y en las Cámaras, con esperanza de que finalmente le llegue la propuesta a Lula y el futuro presidente concuerde con ella.
En el pasado, quien comenzará su tercer mandato como presidente de Brasil el 1 de enero aseguró que estaría de acuerdo con el Congreso si este decidiera aprobar la regulación de apuestas.
Con estimaciones multimillonarias, es esperable que se retome la actividad lo más pronto posible en 2023, aunque solo resta saber si la cargada actividad legislativa en los primeros meses de la presidencia de Lula frenarán el impulso de la industria.
Chile
Contrario a las tendencias vistas a nivel mundial, y especialmente en Latinoamérica, Chile decidió restringir a la industria en 2022: a fines de noviembre, la Cámara de Diputados aprobó la prohibición de los patrocinios en el deporte. Aunque ahora esta medida está siendo debatida en la Comisión de Deportes para definir su futuro, se ha marcado una clara posición del país trasandino.
Como si fuera poco aquella aprobación, esta Comisión ofició al presidente de la FIFA Gianni Infantino para que revise la relación entre la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) y las casas de apuestas, más allá de que 11 de los 16 equipos cuenten con acuerdos con operadores.
Paralelo a esta prohibición, existe un proyecto para que Chile cuente con un mercado online regulado. Los principales operadores de la región ya se encuentran presentes allí y hasta han sido acusados de operar sin licencia, a pesar de ser los más interesados en que el Estado los regule.
En 2023, Chile tendrá que definir qué beneficios quiere obtener de la industria del juego y de qué forma afectará a las entidades deportivas y a las casas de apuestas esta posible prohibición de patrocinios.
Puerto Rico
A mediados de diciembre, la Cámara de Representantes de los Estados Unidos aprobó con 233 votos a favor y 191 votos en contra una ley que le permitiría a Puerto Rico llevar a cabo un referéndum para que decida si quiere convertirse en el 51º estado estadounidense, independizarse o ser un territorio soberano asociado a Estados Unidos.
Se estima que esta medida llega casi sin probabilidades al Senado, pero sería interesante discutir en 2023 en qué forma podría afectar a la regulación de las apuestas en caso de que la isla decidiera independizarse.
Cabe destacar que Puerto Rico ya cuenta con una regulación gracias a la derogación de PASPA a nivel federal en Estados Unidos en 2019.
Luego de lanzar su proceso en 2021, la Comisión de Juegos local aprobó el ingreso de siete empresas al régimen oficial, incluyendo a Ballers Puerto Rico Sportsbook LLC, LMG y CCHPR Hospitality, LLC (Casino Metro) como operadores; y a Swish Analytics Puerto Rico Inc., US Integrity Inc., Continent 8 y Caesars Digital PR Inc como proveedores.
Uno de los puntos mencionados por sus reguladores en los últimos dos años es que Puerto Rico es “la puerta de entrada a Estados Unidos” para las empresas latinoamericanas, mientras que también lo es a Latinoamérica para las empresas estadounidenses.
En caso de independizarse en 2023, ¿seguirá Puerto Rico insistiendo en el poder de su dualidad o buscará reforzarse con su propio régimen que no responda a las regulaciones usuales de Estados Unidos?
