La Sala de Feria de la Cámara Contencioso Administrativo Federal argentina rechazó un pedido por parte del Bingo Ramallo, de la provincia de Buenos Aires, para habilitar la feria judicial. La sala de juegos había pedido que la agencia tributaria AFIP suspendiera el cobro de impuestos o que otorgue una prórroga a los vencimientos.
Luego de que el presidente Alberto Fernández declarara la cuarentena obligatoria para hacer respuesta a la emergencia sanitaria y frenar actividades no esenciales, el bingo discutió que el decreto los forzaba a cerrar sus puertas y por eso la AFIP debía suspender los vencimientos de impuestos. Sin embargo, tal medida no podría hacerse sin la reanudación de la actividad judicial en el país.
Las autoridades del bingo dijeron que por “el abrupto cese de actividad” se les complicaría poder cumplir con el pago de los sueldos de sus empleados. Así, buscaron que se suspendan los vencimientos hasta la finalización de la cuarentena y la reanudación de actividades comerciales.
La Cámara explicó que por la crisis de COVID-19 sólo se habilitaría la actividad judicial frente a una situación de urgencia. Sin embargo, sostuvo que el bingo “no había acreditado una circunstancia de urgencia concreta que importara un riesgo cierto de que su pretensión se tornara ineficaz en el caso de que no fuera tratada durante el receso judicial dispuesto en razón de una emergencia pública”.
Asimismo, dijeron que el bingo no presentó la documentación necesaria para probar el riesgo de sus finanzas, y que sólo entregó una lista con los nombres de sus empleados y los impuestos que querían que se cancelen.
