El proceso de licitación para apuestas deportivas en Paraguay finalizó con la victoria del actual concesionario, Daruma Sam, propietario de la única plataforma de juegos que operó legalmente en los últimos cinco años en el país, Apostala.
Desde los medios paraguayos, destacaron que la empresa ganadora presentó la oferta del canon más bajo. Así, propuso un 22 por ciento, mientras que sus competidoras Consorcio B-Gaming y Gambling S.A. y Play Tech de Paraguay habían propuesto un 23 por ciento y 27 por ciento respectivamente.
Según la Resolución 28/2022, publicada horas atrás, la Comisión Nacional de Juegos de Azar (Conajzar) decidió mantenerle la licencia al actual concesionario “porque cumple con los criterios de experiencia, solvencia económica e infraestructura”.
Además, la Conajzar informó que otras tres empresas tuvieron la capacidad de competir por la licencia, pero solo las tres finalistas habían presentado los documentos formales para avanzar en el proceso.
Denuncias contra la Conajzar
Ante la publicación del resultado de la licitación, el senador Blas Llano fijó una conferencia de prensa para la tarde de hoy (lunes 28) con el fin de “exponer las irregularidades que están vinculadas al proceso”, como notificó a ABC.
Mientras tanto, también se criticó a la Conajzar por otorgarle una licencia de explotación de tragamonedas en Asunción a la empresa Marisol EAS, pese a que la firma no tiene la aprobación del municipio de la capital del país.
Por su parte, el concejal de Asunción Miguel Sosa denunció que el municipio es la única autoridad competente para otorgar licencias de juego, bajo la Ley 1016/97, por lo que el aval de Conajzar sería ilegal.
Sin embargo la presidenta interina del ente regulatorio María Galván del Puerto dijo que el reglamento interno de Conajzar “permite dar un certificado temporal, mientras continúan los trámites en el municipio”. De todas formas, hay varias investigaciones vigentes sobre el tema, ya que la empresa estaría vinculada con la polémica iCrop S.A.
La celebración de Daruma Sam
Antes de conocerse ganador, el presidente de Daruma Sam, Carlo Giuseppe Espinoza, celebró la posibilidad de haber aportado 206 mil millones de guaraníes a lo largo de sus cinco años de operación, que fueron transferidos “al deporte, a la Dirección de Beneficencia y Ayuda Social (Diben) y a otras entidades de beneficencia pública”.
Dichos fondos corresponden al canon del 21 por ciento que pagan al Estado sobre la utilidad bruta de las apuestas deportivas, pero además destacaron el auspicio a clubes de fútbol, el pago de impuestos generales, los pagos por centenares de trabajadores a IPS y que destina importantes sumas a beneficencia cada año.
Asimismo, destacó que su empresa “conoce todos los recovecos del mercado nacional” y explicó que “en cinco años demostraron que, con un excelente sistema operativo, con el cumplimiento de los premios y tributos se puede crear una imagen de marca potente y socialmente beneficiosa”.
El director de Apostala, Manuel Lugo, destacó que su empresa “innovó en un mercado que era completamente informal con anterioridad” y aseguró que “puede dar aún mucho más al país”.
En cuanto a la propuesta para los próximos cinco años, el responsable de la operativa informática, Fernando Ribeiro, proyectó aportes por casi 300.000 millones de guaraníes en concepto de cánones en los próximos cinco años.
“Esta proyección financiera es muy superior en monto a las propuestas más optimistas de nuestra competencia, y no es un cálculo al azar, sino una proyección basada en nuestro histórico de ventas y en la capacidad de nuestra gente”, señaló.
