La Superintendencia de Casinos de Juego (SCJ) de Chile, junto con la nueva alcaldesa de Viña del Mar, Macarena Ripamonti, visitaron la sala de juegos que está próxima a ser inaugurada para asegurar que se hayan cumplido los planes establecidos.
El Casino de Viña del Mar iba a ser operado por Enjoy, pero una serie de desencuentros derivó en la renuncia de la empresa como concesionaria, mientras que se le otorgó el permiso a Casino del Mar S.A.
“Este es un proceso de traspaso inédito que está prototipando las formas de traspasar de un concesionario a otro en Chile con la nueva Ley de Casinos. Esto es muy importante y este municipio tiene que estar encima supervisando”, explicó Ripamonti al diario Cooperativa.
La esperada sala de juegos comenzará a recibir al público a partir del 1 de agosto de este año. “El nuevo operador va a cancelar un monto anual (oferta económica) de 831.000 UF. Eso significa que, pagando proporcionalmente de acuerdo a la entrada de julio, son del orden de 10.200 millones de pesos que ingresarán al presupuesto municipal. Eso, para un municipio que está con un déficit de alrededor de 18.000 millones de pesos, claro que funciona muchísimo para nuestra salud fiscal”, sentenció la alcaldesa.
