Representantes empresariales de salones de juego y del sector de hostelería de la Comunidad Valenciana pidieron dialogar con las autoridades sobre la nueva Ley del Juego. Según la Confederación Empresarial Valenciana (CEV), la actual propuesta restringe innecesariamente la industria privada y presencial, mientras favorece solo al juego online y al juego público.
En este momento, la Legislatura de la comunidad autónoma (Les Corts) está evaluando una reforma para la Ley del Juego, que impondría un mínimo de 850 metros entre los salones de juego y los centros educativos, sanitarios y deportivos.
Para la CEV, “ningún establecimiento de juego ni ningún local de hostelería con máquinas recreativas podría renovar su autorización administrativa tras su vencimiento, dado que sería imposible cumplir esta norma”. De esta manera, como argumentan, la ley “podría incrementar el juego ilegal o clandestino”.
Además, explican que los estudios al respecto confirman que la actividad privada caería entre un 30 y un 65 por ciento, por lo que solo beneficiaría al sector online. “Haría inviable la actividad empresarial”, sentencian.
“La nueva ley dañará gravemente una industria que en la Comunidad Valenciana mantiene más de 7.000 empleos directos y 30.000 indirectos en hostelería, y que contribuye a las arcas públicas con 144 millones de euros en tributación directa y otros 130 millones de euros en impuestos indirectos, que la administración dejaría de recaudar”, dijeron desde la CEV.
Por este motivo, consideran que debe haber un diálogo entre el sector privado de hostelería y juegos, y los legisladores valencianos antes de que se promulgue la reforma.
