El Instituto Brasileño de Juego Responsable (IBJR) emitió un comunicado ayer (lunes 31) sobre los impuestos contemplados en la medida provisional que fue firmada por el presidente Lula da Silva a fines de julio.
Del 16 por ciento esperado, el Gobierno decidió incrementar el valor por dos puntos hasta un 18 por ciento de los ingresos brutos (GGR). Sin embargo, el IBJR advierte que no solo se trata de un 18 por ciento, sino que se contempla otro tipo de carga impositiva.
“Esta versión [de que la carga fiscal es similar a la de Inglaterra] generó cierta vergüenza, ya que muchas de estas empresas —algunas de las que cotizan en bolsa—, operan en Inglaterra y saben que esto no es cierto”, dijo Andre Gelfi, presidente del IBJR, quien advirtió que la carga fiscal será al menos un 350 por ciento superior a la inglesa, de acuerdo a la forma en que fue presentada.
En un comunicado, el Instituto presentó las diferencias entre los impuestos ingleses y los brasileños.
En primer lugar, hizo referencia a que el impuesto sobre el GGR es similar, aunque el brasileño el 20 por ciento superior al inglés. Sin embargo, subrayó que el sistema del país europeo es diferente, ya que las empresas tienen permitido operar fuera del país, algo que no está contemplado en Brasil. También mencionó los distintos impuestos a los que estarán sujetos los operadores, como el IRPJ, CSLL, PIS, COFINS e ISS, que lleva la carga de un 29,3 por ciento a 32,3 por ciento, dependiendo de los municipios.
Por otro lado, el IBJR hizo énfasis en el precio de las licencias: mientras que en el Reino Unido cuentan con un valor de 973 mil reales, en Brasil el precio asciende a los 133.8 millones de reales.
“La tasa brasileña propuesta será un pago en efectivo de la asombrosa cifra de 30 millones de reales”, aseguró, y mencionó la tasa SELIC, actualmente posicionada en un 13,8 por ciento, y las tarifas anuales en el Reino Unido, que son “considerablemente más bajas”.
“Es decir, la tarifa en Brasil será de 6 millones de reales, contrario al millón en Inglaterra. Estos números hacen que la licencia brasileña sea una de las más caras del mundo”, dijo.
Además, habló sobre la tasa de inspección, que para los operadores que mayor volumen de apuestas tendrán, será de 2 millones de reales al mes, o 23 millones al año. Por el contrario, en el Reino Unido no existe tal tipo de impuesto.
“Haciendo una comparación justa, mientras que el Reino Unido grava el 15 por ciento del GGR, Brasil fija el impuesto entre un 45 y un 73 por ciento, dependiendo del volumen de la operación”, agregó.
La maduración del mercado
Uno de los puntos clave a los que hace referencia el IBJR es la maduración del mercado. Inglaterra puede permitirse contar con este tipo de tasas impositivas porque es uno de los mercados más establecidos a nivel global. Brasil, sin embargo, ni siquiera ha lanzado su mercado.
“Cuando el gobierno se queda con más del 30 por ciento del GGR, desencadena una serie de consecuencias no deseados. Así, la tendencia es que sólo unas pocas empresas globales, acostumbradas a operar con márgenes pequeños en mercados competitivos, opten por probar el mercado brasileño”, dijo el IBJR.
“Los diferentes modelos de regulación en el mundo muestran que la opción brasileña tendrá un impacto devastador en los clubes y entidades deportivas, grupos de medios, empresarios digitales y el propio gobierno”, advirtió.
Asimismo, aseguró que el número reducido de operadores con licencia y con capacidad para publicitar hará que colapse el ecosistema de medios deportivos, ya que bajarán los aportes a los clubes mediante patrocinios.
Como consecuencia de los altos impuestos, los clientes optarán por apostar en sitios sin licencia, según el Instituto.
De esta forma, con un mercado paralelo, el Gobierno puede llegar a “perder el control sobre la integridad deportiva y el lavado de dinero”.
Y concluyó: “Individual y colectivamente, todas las empresas miembros de IBJR han solicitado y alentado la velocidad de Brasil en su proceso regulatorio. El Instituto reitera su pleno apoyo a un marco impositivo equivalente al del Reino Unido. No solo porque cree que es el mejor modelo para el desarrollo sostenible de la cadena productiva del juego online en Brasil, sino para advertir sobre el riesgo de una interrupción instantánea del flujo de recursos que ha ayudado a impulsar el ecosistema deportivo en el país”.
