Kindred Group Plc ha notificado a los inversores que el rendimiento de los ingresos del cuarto trimestre de 2022 no coincidió con sus expectativas corporativas, a pesar del boost comercial que significó la Copa del Mundo de 2022.
“Contrariamente a las expectativas”, el operador que cotiza en Estocolmo fue testigo de una interrupción de su calendario de deportes de invierno “que resultó en una reducción del 25 por ciento en los principales partidos de la liga de fútbol”, lo que refleja una caída en las apuestas que no fue compensada por los eventos de la Copa del Mundo.
En el reporte del cuarto trimestre, Kindred registró ingresos grupales de 305 millones de libras esterlinas, un 24 por ciento más que los comparativos de 2021, de 245 millones de libras. A pesar del crecimiento, el rendimiento se mantiene por debajo de las expectativas, ya que durante el segundo trimestre de 2021, Kindred observó un “enfriamiento” del mercado holandés.
Esto estuvo acompañado por un margen de beneficio bruto “históricamente bajo” del 53,9 por ciento y mayores costes de marketing, ya que Kindred afirma que el EBITDA subyacente del cuarto trimestre se situará en torno a los 39 millones de libras esterlinas.
País por país, los Países Bajos, Francia y Suecia continuaron experimentando un “fuerte desarrollo”. Sin embargo, este no fue el caso en Bélgica y los Países Bajos. Bélgica fue un ejemplo de un país con “un mayor enfoque en la sostenibilidad” en 2022, lo que, según el grupo, afectó negativamente sus ingresos.
Mientras tanto, Noruega ha sido un punto débil de Kindred durante gran parte de los últimos 12 meses, donde “varios cambios en su oferta” han afectado las operaciones. En particular, la subsidiaria Trannel de la compañía enfrenta “multas coercitivas diarias” del regulador nacional, Lottoslift, que la acusa de apuntar a los clientes de Noruega a pesar de no tener una licencia local.
Para salvaguardar sus ambiciones para 2023, Kindred ha tomado medidas para abordar los “eventos únicos” del cuarto trimestre de 2022 y los vientos en contra en Bélgica y Noruega.
Esto incluye reducir el gasto en marketing para reducir las pérdidas en América del Norte, y volver a priorizar los proyectos de inversión para “iniciativas estratégicas clave y reducir costos”.
Para reducir aún más los gastos, el grupo planea embarcarse en una “optimización adicional” de sus gastos operativos con el fin de mejorar los resultados de ganancias finales.
A pesar de un final inesperadamente difícil para 2022, la directiva de Kindred afirma que su desempeño en el cuarto trimestre no es indicativo “del verdadero poder de ganancias del negocio”, y mantiene una guía indicativa no recurrente para el próximo año.
La guía de EBITDA indicativa de 2023 ya fue lanzada por Kindred, ya que la compañía cree que el desempeño de 2022 no coincide con el potencial de “ganancias reales” del grupo. Así, la firma anticipa que para diciembre de 2023 habrá logrado un EBITDA de 200 millones de libras esterlinas, basado en el supuesto de que los “márgenes de apuestas deportivas promedio a largo plazo” mejoran la rentabilidad.
Con una perspectiva a largo plazo, el liderazgo de Kindred sigue confiando plenamente en que la empresa puede alcanzar los objetivos financieros de Capital Markets 2025 de generar ingresos totales de 16 mil millones de libras esterlinas, combinados con un margen EBITDA del 21-22 por ciento.
