Con la aprobación de la Cámara de Diputados al proyecto que prohíbe los patrocinios deportivos por parte de la industria del juego y las apuestas, el mercado emergente de Chile se podría diferenciar del desarrollo que se está viendo en el resto de Latinoamérica.
El proyecto, sin embargo, ha recibido varias indicaciones en la sesión de ayer (miércoles 30), por lo que será nuevamente evaluado por la Comisión de Deportes de la Cámara para definir cómo sigue avanzando la normativa.
De todas formas, ambas industrias se están preparando para las consecuencias de la entrada en vigor del proyecto, ya que actualmente 11 de los 16 equipos de fútbol de primera división de Chile, junto con la Selección Nacional, tienen acuerdos de patrocinios con operadores de apuestas deportivas.
En la propuesta, se lee que “en caso que el infractor a esta prohibición sea una organización deportiva profesional, cualquier sea su denominación, ésta será sancionada con la eliminación del registro de organizaciones deportivas profesionales (…) sin que sea necesario que la infracción sea calificada de grave ni reiterada, en conjunto con la multa a la cual hace referencia el inciso precedente”.
Además, el proyecto establecería una prohibición de participación en directorios de organizaciones deportivas a propietarios de acciones en sociedades o empresas del juego online y las apuestas deportivas.
Paralelamente a este resultado en Diputados, la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) fue acusada por el equipo de fútbol de Santiago Unión Española de obligar a usar logos de casas de apuestas en sus camisetas.
Según notificaron, “Unión Española informa, que en la reunión de Consejo de Presidentes de Clubes celebrada ayer para la definición de las bases del Torneo Nacional 2023 se instó a los clubes afiliados al uso del logo del próximo auspiciador del torneo en parte de la indumentaria y otros espacios publicitarios”.
Y agregaron: “Siendo la marca en referencia una casa de apuestas online, manifestamos durante el Consejo nuestra total y absoluta disconformidad por esta determinación, más aún considerando que existe en tramitación en la Cámara de Diputados un Proyecto de Ley, el que su idea matriz consiste en desvincular la relación comercial entre las actividades deportivas y las casas de apuestas, particularmente mediante la prohibición de la presencia de publicidad de estas últimas en la realización de eventos deportivos”.
Este sería el primer apoyo a la prohibición en el fútbol chileno, luego de que el presidente de Blanco y Negro (sociedad que controla el popular club Colo Colo), Alfredo Stöhwing, defendiera la decisión de estrechar lazos con la casa de apuestas Coolbet y cuestionara las propuestas para impedir este tipo de acuerdos, junto con Pablo Milad, presidente de la ANFP, que advirtió que “las casas de apuestas son un soporte significativo de los clubes”.
Esperanzas en el sector de las apuestas respecto de los patrocinios
Días atrás, el representante legal de las casas de apuestas Betano, Betsson, Coolbet, Esterlarbet y Latamwin en Chile, Carlos Baeza, aseguró que si bien los clubes están preocupados, todavía queda optimismo sobre el resultado. “Nos hemos reunido con varios parlamentarios para explicarles el funcionamiento de la industria, incluidos aquellos que habían criticado fuertemente a las plataformas de apuestas con el argumento de la supuesta ilegalidad o el arreglo de partidos”, dijo.
Y continuó: “Los parlamentarios han entendido que esta es una de las industrias más reguladas del mundo, que cumple incluso con regulaciones que exceden las que se están proponiendo en Chile”.
Además, compartió que también han entablado diálogos con los clubes y sus directivos “explicándoles que es una actividad legal”. “Las plataformas de apuestas son las principales auspiciadoras de los equipos de fútbol profesional, replicando una tendencia mundial, y estos recursos también benefician el fútbol formativo y femenino”, destacó.
Por este motivo, “el mejor escenario es que se regule esta actividad y, en consecuencia, la publicidad, pero que no se prohíba”, dado que esto no solo perjudicaría a los clubes, sino a los usuarios, “ya que la publicidad permite saber cuáles plataformas son legales”.
“La experiencia internacional muestra que la prohibición lo único que logra es aumentar el mercado negro, con riesgos para las personas”, concluyó.
