El nuevo PDU quita 54 hectáreas del proyecto de Hard Rock en Cataluña y obliga a la renegociación de impuestos para los municipios

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Las autoridades de Tarragona compartieron los detalles del nuevo Plan Director Urbanístico (PDU) aprobado la semana pasada, que demuestra que se “sacrificarán” 54 hectáreas del municipio de Vila-seca al contemplar áreas de protección ambiental.

En principio, los dos municipios que hospedarán el gran proyecto de casinos y turismo del operador internacional Hard Rock, Vila-seca y Salou, ya estaban revisando su anterior acuerdo respecto de la repartición de los impuestos. 

Sin embargo, bajo el nuevo PDU, la negociación se hace visible, ya que los expertos aseguran que Vila-seca “pecó de buena fe” y está perdiendo posicionamiento al haber cedido zonas verdes, antes de la última aprobación, a las que se suman las nuevas áreas de protección ambiental del último PDU.

Si bien la nueva disposición responde a una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), el conflicto por el cobro de impuestos entre las autoridades de ambos municipios puede derivar en una larga demora para el Hard Rock Entertainment World.

“Aunque logra mantener casi la totalidad del techo edificable inicial (740.000 m2 para hoteles, comercios y casinos), sí que ‘sacrifica’ 54 hectáreas del término de Vila-seca para que sea factible el proyecto. Esta extensión de terreno es el resultado de cálculos matemáticos de riesgo químico por su proximidad con la industria química”, explicaron desde Diari de Tarragona.

Las 54 hectáreas que se han quitado del proyecto abarcan un área que representa “riesgo químico” por unas empresas de esta industria situadas al otro lado del Raval de la Mar. De todas formas, desde el Ayuntamiento de Vila-seca están al tanto de que estas áreas pueden reducirse “en un futuro, si las empresas refuerzan las medidas de seguridad que minimizarían cualquier incidencia química hacia la zona turística de Hard Rock”, informó el mismo medio.

Mientras el municipio de Salou no se vio perjudicado por el PDU, se estima que desde Vila-seca apelarán contra esta aprobación inicial para “reducir los bloqueos medioambientales” determinados por la disposición. Por ahora, desde el municipio “guardan silencio”, según destacaron los medios locales.