La CONMEBOL confirmó que el estadio de Maracaná, en Río de Janeiro (Brasil), albergará la final de la Copa Libertadores de 2020. El organismo rector del fútbol sudamericano también hizo oficial al estadio Mario Kempes, de Córdoba (Argentina), como sede de la final de la Copa Sudamericana del próximo curso.
Estas dos ciudades tomarán el testigo de Santiago de Chile (Libertadores) y Asunción (Sudamericana), que durante el mes de noviembre harán de anfitrionas en las primeras finales a partido único de la historia de las competiciones de CONMEBOL.
El Estadio Jornalista Mário Filho, más popularmente conocido como Maracaná, es un clásico en los partidos importantes y en las finales. Hace apenas unos meses acogió la final de la Copa América y antes lo hizo con el Mundial de 2014 y la Copa Confederaciones de 2013. Es el recinto histórico del fútbol brasileño y en él juegan sus partidos algunos conjuntos de Río, especialmente Flamengo. Tiene un aforo de 84.738 espectadores. La final de la Libertadores de Maracaná será el 21 de noviembre de 2020.
Por su parte, el Mario Kempes de Córdoba es el estadio más moderno de cuantos hay en Argentina. Fue objeto de una fuerte remodelación para la Copa América de 2011 y desde entonces se han jugado en él varias finales de Copa y de Supercopa argentina. Tiene un aforo de 57.000 espectadores. Talleres es el equipo que actúa en él como local. La final de la Sudamericana en el Mario Kempes será el 7 de noviembre de 2020.
Los partidos de vuelta de las semifinales de la Libertadores de este año se disputarán la próxima semana. El martes, Boca buscará revertir en La Bombonera un adverso 2-0 ante River por un lugar en la gran final, mientras que el miércoles Flamengo recibirá a Gremio en el Maracaná tras igualar en uno en el partido de ida.
La final se jugará el 23 de noviembre en el Estadio Nacional Julio Martínez Pradanos de Santiago de Chile.