Brasil y Argentina estarían en conversaciones para trabajar en el desarrollo de una moneda en común, similar al euro, según anunció el Financial Times esta mañana.
Esta semana se dará a conocer un anuncio sobre el proyecto en una reunión cumbre en Buenos Aires, donde se difundirá la intención de invitar a otros países sudamericanos al proyecto, junto con las dos economías más grandes de Sudamérica.
El Financial Times señaló que si se acuerda y se establece la moneda común, esto podría crear el segundo bloque monetario más grande del mundo y fortalecer las relaciones económicas entre Brasil y Argentina, bajo las estimaciones del presidente argentino Alberto Fernández y el recién elegido presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva.
Lula está actualmente de visita en Argentina durante su viaje internacional inaugural, que también marcó el regreso de Brasil al organismo de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), que había dejado previamente en 2019 durante el mandato del ex presidente Jair Bolsonaro.
Los funcionarios brasileños recomendaron que la moneda común se titule “Sur” para aliviar parte de su dependencia del dólar y reforzar el comercio dentro de la región.
El ministro de Economía de Argentina, Sergio Massa, explicó que ambos países abrirán discusiones sobre la necesidad de una moneda común, destacando la obligatoriedad de analizar todos los aspectos antes de tomar una decisión firme.
Sobre esto, comentó: “Habrá una decisión de comenzar a estudiar los parámetros necesarios para una moneda común, que incluye todo, desde cuestiones fiscales hasta el tamaño de la economía y el papel de los bancos centrales”.
“Sería un estudio de mecanismos de integración comercial. No quiero crear falsas expectativas, es el primer paso de un largo camino que debe recorrer América Latina”, agregó Massa.
Una moneda común sudamericana se mencionó inicialmente en las discusiones durante la campaña presidencial de Lula. El ministro de Finanzas de Brasil, Fernando Haddad, también había compartido planes para la moneda en un artículo brasileño el año pasado.
Una moneda común unida dentro de la región podría representar el 5 por ciento del producto interno bruto mundial, una cifra considerable ya que la unión monetaria más grande del mundo está representada por el euro.
Cabe destacar que Sur funcionaría en paralelo con la existencia del peso argentino y del real brasileño, y que en caso de cubrir todo Latinoamérica, representaría cerca del 5 por ciento del comercio global. De todas formas, también Massa destacó que a Europa le llevó 35 años llegar al euro, por lo que sería un proyecto a largo plazo.
En este marco, se tendría en cuenta que si bien para Argentina (que el año pasado superó el 90 por ciento de inflación) la moneda común genera “entusiasmo”, algunos representantes de Brasil describieron al país vecino como “perennemente volátil”.
Según el Financial Times, el comercio bilateral entre la Argentina y Brasil aumentó 21 por ciento en 2022, “sin dejar de señalar que el atractivo de una moneda común es más obvio para la Argentina, donde la inflación se acerca al 100 por ciento mientras el Banco Central imprime dinero para financiar el gasto”.