El año del salto del charco

El año del Salto del Charco

2020 se presenta en Europa con un mayor control legislativo y ejecutivo sobre el terreno del juego y las apuestas, ya sea en un plano digital o estrictamente físico.

Aparece, asimismo, como un año clave en eventos deportivos globales. Además de todas las competiciones nacionales, irrumpen citas ineludibles como los Juegos Olímpicos, la Eurocopa y, para hacer hincapié en la región que se destacará a continuación, también la Copa América.

En paralelo, Latinoamérica ha supuesto en los últimos siglos una solución para muchos habitantes europeos que, por necesidades sociales o económicas, se han visto obligados a “hacer las Américas”. A saltar el charco. En la mayoría de estos casos, este salto provocó que los ciudadanos europeos se reinventaran en un territorio nuevo y sembraran un porvenir que floreció tiempo después.

Pues bien, parece que 2020 brindará una oportunidad similar: tras unos años de crecimiento en un mercado con muchos jugadores, estas marcas europeas se ven, de repente, restringidas por unas reglas de juego modificadas. Este mapa legislativo va a afectar a la capacidad de crecimiento y expansión en la región.

Igualmente, las grandes plataformas que soportan las inversiones publicitarias de las empresas de juego ven disminuirse sus porcentajes de participación en difusión. 

Con este nuevo panorama, un camino parece sólido y resolutivo: el salto de charco a las Américas bajo el paraguas de una estrategia de marketing orgánica.

El marketing de influencia aporta una solución clara: la figura clásica de un gran brand ambassador nacional abandera a cada marca, como las grandes figuras o ex jugadores deportivos que tan bien han funcionado en otros países. Así, se consigue un conocimiento y adscripción del público local a la empresa. Luego, con una red selecta nacional de micro y macro influencers, se consigue la difusión y expansión de ese mensaje al público más nicho de deportes grandes y pequeños, y del mundo de las apuestas.

Por último, los anuncios promocionados se publican de forma programada y segmentada en distintos formatos multiplataforma (ya sea Twitter, Instagram, Facebook u otras, según tipo de público), para conseguir que el contenido y la imagen de marca abarquen todos los targets y cumplan su recorrido íntegro promocional.

La suma de las tres variables, a las que se pueden añadir otros formatos o plataformas adicionales, logrará el esperado retorno en forma de registros y depósitos. El trío perfecto incluye Branding, Awareness y Conversión.

DeQuéBuzz lleva años desarrollando este modelo de salto de charco bidireccionalmente. Desde oficinas en Madrid y en Ciudad de México, y con clientes tradicionalmente globales, ha logrado exportar la influencia que sus socios solicitan, sin necesidad de que ellos instalen oficinas en las zonas. De todas formas, si los clientes tienen oficinas, la empresa ayuda a ejecutar allí estas estrategias y a dar soporte tanto a ellos como a sus agencias locales, con quienes DeQuéBuzz trabaja mano a mano.

“Creemos que es importante que las empresas no pierdan la oportunidad de saltar el charco y anticiparse a sus competidores en el continente latinoamericano. Grandes experiencias nos esperan”, comenta Julen Elizari, CEO y fundador de DeQuéBuzz.