La trama de fraude en las apuestas en Brasil sigue generando consecuencias para el deporte local, luego de que la competencia de la Serie B del Campeonato Brasileño en 2022 se viera manchada por este caso.
Esta semana, el Tombense Futebol Clube anunció la rescisión del contrato del futbolista Joseph, un defensor apuntado por haber cometido una infracción dentro de su propia área durante un partido ante Criciúma, supuestamente para favorecer al esquema de amaño deportivo.
Según la investigación policial, el fraude en las apuestas involucraba la comisión de penales en los primeros tiempos de los juegos entre Sampaio Corrêa y Londrina, Tombense y Criciúma y Vila Nova-GO y Sport.
De todos modos, la rescisión del contrato de Joseph con el Tombense se dió “de común acuerdo”, según anunciaron las partes, para que el jugador atienda al proceso judicial en su contra.
El defensor es uno de los ocho profesionales acusados de participar: cinco del Sampaio Corrêa (cuatro ya cambiaron de club), el propio Joseph y dos de Vila Nova (uno de ellos Romário, separado de la institución el año pasado).
El caso se destapó luego de la denuncia del presidente del Vila Nova, Hugo Jorge Bravo, quien declaró haber sido alertado de la participación del jugador Romário en este fraude por los propios organizadores de la estafa.
De acuerdo con el dirigente, luego de enfrentarse al Sport, recibió el aviso de que el jugador había recibido 10 mil reales para concretar el fraude y que recibiría 140 mil más una vez que se hubiera materializado la ganancia.
“Esta persona nos dijo que la combinación fue un tiro penal (por el que se acusa a Domingos) en el primer tiempo del partido y otros dos partidos de la misma ronda (Sampaio Corrêa-Londrina y Criciuma-Tombense)”, explicó.
A partir de la denuncia del Vila Nova, las autoridades brasileñas actuaron y ejecutaron la “Operación Pena Máxima”, con detenciones en Goiás, Minas Gerais, São Paulo y Río de Janeiro, mientras continúan con la investigación.