Paulo Schimitt, ex abogado del Tribunal Superior de Justicia Deportiva (STJD) de Brasil y actual presidente del Comité de Integridad de la Federación Paulista de Fútbol, sugirió la creación de un organismo especializado, que trabajaría junto con la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) para juzgar actuaciones delictivas relacionadas con las apuestas deportivas.
Citando como ejemplo el caso de Bruno Henrique, Schimitt afirmó, en entrevista con Globo Esporte Paraná, que este “es un tema que merece órganos especializados, porque no nos es posible tener casos identificados o iniciar procesos judiciales un año más tarde”.
Cabe recordar que el delantero del Flamengo está siendo investigado por la Operación de Amaños Deportivos. Según la Policía Federal, el jugador habría forzado una tarjeta amarilla en el duelo contra Santos, válido por la 31ª jornada del Brasileirão 2023.
El organismo especializado en apuestas deportivas
“Sugiero que sea un comité de arbitraje vinculado a la CBF, pero independiente y autónomo en términos de nominaciones o por elección. El asunto es especializado y merece un tratamiento diferente. En el movimiento olímpico ya tenemos esto, se llama Comité de Defensa del Fair Play, organismo vinculado a la COB. Estoy cada vez más convencido de que la justicia deportiva ordinaria no debería procesar ni juzgar estos casos”, continuó Schimitt.
Además, el presidente del Comité de Integridad de la Federación Paulista de Fútbol destacó la importancia de medidas prácticas que tengan como objetivo proteger el deporte, recordando que la manipulación es un delito en el país: “Necesitamos abordar este problema desde el punto de vista de proteger el futbol. Además del control, la inspección y eventualmente la rendición de cuentas y la competencia, porque manipular la competencia es un delito en Brasil con penas de dos a seis años de prisión y una multa, debemos trabajar en los aspectos educativos”.
Schmitt también exigió a los deportistas mayor cuidado y concienciación: “La apuesta pertenece al público en general. Los deportistas deben ser conscientes de que, además de no poder apostar, sus familiares tampoco pueden apostar en los juegos en los que participan. Este es un delito complejo y tenemos varios frentes para tratar de identificar y erradicar los casos”.