La Cámara de Diputados de Brasil creó una Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI) para investigar las denuncias de amaño y fraude en las apuestas deportivas contempladas dentro de la Operación Pena Máxima.
El cuerpo se creó por iniciativa del diputado Felipe Carreras, quien se refirió a las “lagunas generadas por la falta de regulación” de las apuestas deportivas, que “permiten que los delincuentes, actuando de mala fe, empañen el deporte”.
La CPI estará presidida por el diputado Julio Arcoverde y, durante 120 días, analizará los hechos revelados por el Ministerio Público de Goiás en su investigación. Ese lapso podría ser prorrogado por otros 60 días, sin contar el período de receso legislativo.
La semana entrante, el cuerpo se reunirá para establecer su plan de trabajo y, a partir de entonces, se reunirá semanalmente para analizar la evolución del caso, escuchar testimonios y debatir al respecto del masivo caso de fraude en las apuestas deportivas que sacude a Brasil.
Mientras tanto, el gobierno avanza con la regulación del segmento para lanzar oficialmente el mercado local. El Ministerio de Hacienda de Brasil anunció el 11 de mayo que estaba en la etapa final de discusión de los detalles de la medida provisional (MP) que regulará la industria. De este modo, solo restaría que el Presidente, Luiz Inázio Lula Da Silva, firme el documento para hacerlo oficial.
Sin embargo, cabe la posibilidad de que la MP se transforme en un proyecto de ley para que sea discutida en el Congreso. Así lo solicitó el presidente de la Cámara de Diputados, Artur Lira, quien negocia con el Ministerio de Relaciones Institucionales para concretarlo.
