La Comisión Nacional de Juegos de Azar (Conajzar) de Paraguay mostró “pleno” apoyo a la Ley 6903, promulgada por el presidente de la república Mario Abdo Benítez la semana pasada.
La nueva regulación impide la instalación de máquinas tragamonedas en comercios, con el objetivo de que los niños y jóvenes no tengan libre acceso al juego y evitar que se desarrollen adicciones.
Esto significa una anulación del contrato que actualmente Conajzar mantiene con la empresa iCrop, que habilitaba este tipo de máquinas mientras que la compañía privada quedaba a cargo de la fiscalización.
Pese a esto, Conajzar aseguró que ya está trabajando en la reglamentación de la normativa “a los efectos de coordinar con los municipios su correcta aplicación y estricto cumplimiento”.
Contrario a cómo funcionaba anteriormente la instalación en la industria local, las municipalidades ahora estarán a cargo de las concesiones y los permisos para explotar los juegos de azar, tal como dispone el proyecto, pero en coordinación con Conajzar.
Los municipios deberán analizar las ofertas de las empresas interesadas en operar máquinas tragamonedas y definir cuál es la mejor y si cumple con las normativas. Por otro lado, la Ley 6903 describe que los municipios también tendrán la potestad de imponer multas, que llegarán a un salario mínimo vigente, aunque, en caso de reincidencia, se multiplicará.