El alcalde de Salou, Pere Granados, aseguró que el Hard Rock Entertainment World está “más cerca que nunca”. A pesar del reciente revés legislativo para el proyecto, el mandatario de uno de los municipios donde se instalaría el emprendimiento mantiene la confianza por su futuro.
Según lo citó el informativo catalán Ser, Granados “siempre ha estado a favor”, y lamentó que “con historias inventadas se ha perdido una década”.
Puntualmente, lo que dispara la incertidumbre con respecto al futuro de Hard Rock en Tarragona es la eliminación de los beneficios fiscales. Sin embargo, para el alcalde de Salou, el aumento impositivo “no implica oposición al proyecto”.
El desarrollo del Hard Rock Entertainment World está previsto para realizarse en Salou y Vila Seca. El alcalde de este último, a diferencia de Granados, había asegurado que el proyecto del gigante internacional “está muerto”, días antes de que se confirmara la votación en el Parlamento.
Segura pronostica que a la multinacional “no le interesará tirar adelante el proyecto tal y como estaba planteado”. Sin embargo, advirtió que dar de baja el proyecto “sería imposible”.
El apoyo del gobierno autonómico
Recientemente, la consejera de Economía y Hacienda de Cataluña, Alícia Romero, defendió el proyecto y dijo que es “más que un casino”.
En diálogo con Catalunya Ràdio, Romero aseguró que la propuesta del gigante internacional “tiene muchos puntos positivos”, pese a la fuerte oposición que se le presenta.
“Hard Rock no es solo un casino, sino que quiere complementar (al parque de diversiones) PortAventura. Hay un espacio para congresos y una parte comercial. Un entorno que probablemente necesita estos elementos”, aseguró.
La funcionaria se mostró expectante por la decisión que vayan a tomar desde Hard Rock, y apuntó que “trabajarán con ellos” en base a lo que determinen.
El aumento de la presión fiscal sobre Hard Rock
A fines de enero, el Parlamento de Cataluña aprobó la modificación impositiva que eleva la tasa sobre los grandes casinos. De esta forma, el proyecto de Hard Rock en Vila-Seca y Salou, pierde el incentivo de pagar solo 10 por ciento, y estará sujeto a un gravamen del 55 por ciento.
De acuerdo con la líder de los comuns, Jéssica Albiach, con esta decisión “se cierra la puerta al proyecto (…) que convertiría a la región en Las Vegas de Europa”. Sin embargo, su par Raquel Sans aseguró que solo le quita “el vestido fiscal a medida” de la empresa internacional, según citó El Economista.
Puntualmente, el proyecto elimina el artículo 17 de la Ley 6/2014 de la comunidad autónoma, que estipula: “El tipo impositivo aplicable a los casinos de juego es del 10 por ciento”. De este modo, la carga fiscal sobre un eventual casino de Hard Rock sería del 55 por ciento, tal y como lo establecía originalmente la Ley 25/1998.