El Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) resolvió aceptar a Corporación Meier como tercero coadyuvante en la causa que analiza la Justicia por presunta colusión en la licitación de casinos municipales.
El grupo peruano había solicitado sumarse al caso que investiga a Dreams, Enjoy y Marina del Sol por presunta cartelización en los procesos celebrados en 2020 y 2021.
Ante esta situación, Corporación Meier realizó una presentación ante el TDLC, a través de sus filiales Casino del Mar, Casino del Maule y Gran Casino de Talca, con las que aplicó a distintas licencias.
Según el Tribunal, corresponde admitir el reclamo dadas “las características de las licitaciones de otorgamiento y renovación de permisos de casinos de juego, que implican la asignación de un monopolio de larga duración”.
Por otro lado, consideró que “las solicitantes (las tres filiales) han participado en procesos de licitación para otorgar permisos de casinos de juegos y han invocado interés en los procesos licitatorios” que puedan realizarse en el futuro.
El planteo de Corporación Meier ante la Justicia
Para el grupo peruano, el TDLC debería “poner término a los permisos obtenidos por las Empresas Requeridas en los Procesos Licitatorios 2020 y 2021″, dado que el presunto trabajo conjunto entre el resto de las competidoras no le permitió competir en igualdad de condiciones.
Según recogió La Tercera, el escrito que presentaron ante la Justicia explica que “Casino del Maule y Casino del Mar fueron competidores actuales y potenciales de Dreams, Enjoy y Marina del Sol en los Procesos Licitatorios 2020 y 2021″, y que “las rentas sobrenormales obtenidas por las Empresas Requeridas a partir del acuerdo anticompetitivo les han permitido subsidiar artificialmente sus ofertas en procesos licitatorios organizados por la SCJ, impidiéndole a mis representadas y a Grupo Meier competir efectivamente”.
El caso por presunta colusión en la licitación de los casinos
En octubre, la Fiscalía Nacional Económica (FNE) de Chile acusó a Enjoy, Dreams y Marina del Sol de cartelizarse para manipular el resultado de la licitación de los casinos municipales.
El organismo presentó un requerimiento ante la Justicia por la presunta vulneración de la libre de competencia y causar perjuicios al estado. Además, reclama multas millonarias y la revocación de 14 permisos de operación de casinos.
La FNE acusó a cinco altos ejecutivos de los tres operadores de ser responsables del presunto hecho. Sin embargo, solo pidió sanciones para cuatro de ellos, que suponen multas de unas 171.354 Unidades Tributarias Anuales (UTA), o 151,9 millones de dólares al cierre de esta edición. Se trata de las multas más altas de la historia.