Mesa redonda de SBC: Navegando las fronteras del continente americano

La atención del mundo de las apuestas deportivas se ha posado recientemente sobre el otro lado del Atlántico, ya que tanto Norteamérica como Latinoamérica ofrecen grandes oportunidades para aquellos preparados para dominar. Sin embargo, por distintas razones, hay menos empresas que intentan expandirse hacia ambos lados del Canal de Panamá.

SBC Americas habló con Eddie Morales, director de Ventas para Latinoamérica de BetGames.TV, Alex Leese, CEO de Pronet Gaming, y Chris Nikolopoulos, CCO de Betby, para discutir sobre las posibilidades que ofrece el continente y para saber por qué es un desafío ingresar fácilmente a todos sus mercados.

Eddie Morales

La derogación de PASPA y la apertura del mercado de las apuestas deportivas en Latinoamérica ha atraído tanto a operadores como a proveedores internacionales, pero rara vez a ambos al mismo tiempo. ¿Cuáles son las razones de esta tendencia?

No es ningún secreto que a los latinoamericanos les encanta el deporte y apostar en todas sus modalidades. Sin embargo, hasta hace poco, el mercado fue ignorado por las principales empresas de juego online debido a la falta de regulación en sus distintos mercados. Por lo tanto, para dar respuesta a la demanda de apuestas deportivas y activar a los jugadores latinoamericanos, es clave la regulación del principal mercado de la región. Una vez que Brasil se lance, otros le seguirán, y una vez que esto se haga con claridad y propósito, tanto los operadores como los proveedores encontrarán grandes oportunidades comerciales para presentarse.

¿Apresurarse a entrar en una región significa que puedes perder ventaja de ser uno de los primeros en llegar a otra?

No necesariamente. Depende de cómo alguien que llega a esa region ejecute su estrategia de comercialización en la región, considerando sus opciones en ese momento. En mi opinión, el mejor enfoque para entrar en Latinoamérica es haciéndolo en varios países, pero con contenido, marketing y operaciones localizadas, con el fin de diversificar el riesgo y la inversión.

Para lograr una posición dominante en un país y tener éxito desde una perspectiva ROI, se requiere una gran cuota de mercado, y eso podría decirse que solo lo logran unos pocos gigantes de la industria o marcas locales muy dominantes que estén ejecutando una exitosa estrategia multicanal de mediano a largo plazo. Actualmente, la elección general gira en torno a un enfoque multi-país pre-regulado, o permanecer dentro de los mercados regulados de México, Colombia y algunas provincias argentinas.

Con Colombia como el líder en regulación en Latinoamérica, ¿pueden las jurisdicciones vecinas y los estados en Norteamérica seguir su ejemplo con marcos regulatorios progresistas?

Eso esperamos. Sin embargo, sin lugar a dudas, la situación política de cada estado o país determinará su propia versión, potencialmente muy diferentes, de lo que significa ser “progresista”. La forma en que eligen tratar el tema de la protección del jugador para equilibrarlo con los requisitos comerciales también es posible que difiera, y luego los reguladores también tendrán que considerar la necesidad de proteger al negocio minorista después de luchar con esta pandemia.

Es probable que algunos sigan el liderazgo progresista de Colombia, algunas provincias argentinas ya han avanzado en el tema, y es de esperar que Brasil tome una ruta similar en los próximos años.

Alex Leese

La derogación de PASPA y la apertura del mercado de las apuestas deportivas en Latinoamérica ha atraído tanto a operadores como a proveedores internacionales, pero rara vez a ambos al mismo tiempo. ¿Cuáles son las razones de esta tendencia?

Estados Unidos se presenta como una enorme oportunidad para los operadores. Esto ha sido demostrado por marcas como William Hill y GVC, que han tomado una ventaja tempranamente al centrar su desarrollo tecnológico en el mercado y formar las asociaciones adecuadas.

Al mismo tiempo, el panorama regulatorio fragmentado es un gran desafío. Solo los operadores más grandes con las opciones tecnológicas más ágiles pueden concentrarse en varios estados de los Estados Unidos y en diferentes países de Sudamérica al mismo tiempo. Dado que muchas veces tener empresas conjuntas es una necesidad, apuntar a ambas regiones exigiría incluso a los que más recursos tienen.

Sin embargo, los retrasos en la regulación en Latinoamérica puede significarle un respiro a los operadores que apuntan a expandirse globalmente. Pueden enfocarse en los Estados Unidos por el momento, mientras, en segundo plano, aplican para obtener licencias en el sur y evalúan adecuadamente como desplegar su tecnología.

Para los proveedores de tecnología y contenido, la elección es un poco más clara. En definitiva, deben estar listos para prestar servicio a los operadores desde el día 1, lo que requiere una inversión inicial en capacidad tecnológica, mientras la recuperación debe esperar a que se firmen los acuerdos.

¿Apresurarse a entrar en una región significa que puedes perder ventaja de ser uno de los primeros en llegar a otra?

Dado el costo y la complejidad de luchas en múltiples frentes, está claro qué es lo que debe priorizar cada operador y proveedor. Pero también creo que un elemento de compromiso podría ayudar a las empresas a hacer más en más mercados.

Optar por subcontratar sus plataformas a proveedores externos puede ser una decisión difícil para los operadores más grandes que están acostumbrados a su propia tecnología patentada en otros mercados, pero podría ser la más pragmática. Sin duda, es más fácil para un operador más pequeño que podría ganar tracción en el mercado a través de este enfoque.

Una estrategia tecnológica pragmática siempre le permitirá a los operadores poder cubrir más terreno, mientras que trabajar con socios locales también puede eliminar barreras. Para los proveedores, es un caso más de uno u otro en términos de dónde invertir en tecnología y, por lo tanto, algunas de las tendencias recientes de M&A han apuntado hacia una división más definida de si un proveedor puede prestar servicios en ambos continentes.

Con Colombia como el líder en regulación en Latinoamérica, ¿pueden las jurisdicciones vecinas y los estados en Norteamérica seguir su ejemplo con marcos regulatorios progresistas?

Creo que es muy poco probable que los estados norteamericanos se vean influenciados por el enfoque de Colombia. O, para el caso, por cualquier otro mercado latinoamericano o europeo. Sería más fácil para la industria, pero la situación política y socio-económica es completamente diferente.

La regulación de las apuestas deportivas en Norteamérica es distinta a otros marcos de la industria. Los legisladores de cada estado tienen sus propias ideas. Los países latinoamericanos, sin embargo, han tenido que buscar regulaciones del estilo europeo, particularmente de España e Italia. Como resultado, muchas de las firmas de abogados y proveedores líderes en esos países han demostrado ser influyentes en el continente, y particularmente en Colombia.

Chris Nikolopoulos

La derogación de PASPA y la apertura del mercado de las apuestas deportivas en Latinoamérica ha atraído tanto a operadores como a proveedores internacionales, pero rara vez a ambos al mismo tiempo. ¿Cuáles son las razones de esta tendencia?

Estados Unidos y Latinoamérica puede que estén en el mismo continente, pero estamos hablando de mercados bastante diferentes tanto en términos de requisitos legales y productos, como de proyecciones de ingresos y oportunidades.

En la actualidad, Estados Unidos parece atraer a corporaciones más grandes, pero este no es necesariamente el caso de las empresas más pequeñas. Latinoamérica, por otro lado, tiene varios países se caracterizan por tener una gran población que se siente atraída por los deportes y son definitivamente un objetivo principal para los operadores y proveedores. El interés ya existe. Tomar esos mercados y agregarles marcos regulatorios favorables es clave para que las apuestas deportivas puedan despegar.

¿Apresurarse a entrar en una región significa que puedes perder ventaja de ser uno de los primeros en llegar a otra?

Entrar en un mercado nuevo no es la panacea, esto es algo que saben todos los operadores y proveedores con experiencia. Hay mucho trabajo por hacer detrás de escena antes de que las empresas estén listas para dar esos pasos y, por lo general, implica diferentes requisitos desde una perspectiva legal, de productos y de recursos humanos. Me gusta creer que todas las empresas se están tomando todos esos problemas en serio en lugar de apresurarse a ingresar al mercado con un producto no localizado. En otras palabras, es una cuestión de trazar el mapa y considerar los recursos.

Si entrar en un nuevo mercado significa perder la ventaja de ser pionero en otro, que así sea. Nos gusta ser rápidos pero nunca a expensas de la calidad.

Teniendo en cuenta la trama de tener estados regulados y no regulados en Norteamérica, ¿navegar las demandas legislativas impulsa a las empresas al sur de la frontera?

Actualmente, vemos que la complejidad en torno al mercado del juego online de los Estados Unidos es mayor a la que vemos al sur del Canal de Panamá. Cada estado tiene sus propias leyes y regulaciones, y todavía tenemos que esperar y ver qué puede suceder con algunos de los estados más grandes que pueden actuar como “revolucionarios”. Por otro lado, en Latinoamérica, hay mercados emergentes que aceptan las nuevas tecnologías y la innovación con los brazos abiertos, mientras que ofrecen, en la mayoría de los casos, un marco legal más amigable para los negocios.

Con Colombia como el líder en regulación en Latinoamérica, ¿pueden las jurisdicciones vecinas y los estados en Norteamérica seguir su ejemplo con marcos regulatorios progresistas?

Sí, definitivamente. Colombia ha establecido un mercado regulado de juego online que continúa creciendo a un ritmo impresionante y es un gran ejemplo para todos los territorios vecinos. Establecer un marco legal favorable es algo que beneficia tanto a los clientes, como a los Estados, que actualmente están perdiendo una fuente de ingresos por la actividad no regulada. Esperamos que pronto podamos hablar de emocionantes avances regulatorios en Brasil, Perú, Argentina y más, a medida que la región continúa desarrollándose.