El caso de amaños deportivos Bolivia ha marcado un precedente en Latinoamérica al suspender todas las ligas de fútbol profesional mientras se avanza con la investigación por las sospechas de manipulación de resultados, y ahora Perú podría plantear un panorama similar.
Esta semana, luego de que unos días atrás se diera a conocer una denuncia al club Academia Cantolao por posible involucramiento en una “mafia de apuestas deportivas”, la Agremiación de Futbolistas Profesionales del Perú (Safap) pidió a la Federación Peruana de Fútbol (FPF) que se comprometa con una profunda investigación al desempeño en cada partido de la Liga 1.
Además, las denuncias se agravaron con los dichos del ex futbolista y actual presidente de Safap, Roberto Silva Pró, quien reveló: “Tenemos un caso en el que el mismo club llevó a un jugador a un lugar determinado para que le pongan una pistola en la pierna y le digan que tiene que tirarse para atrás”.
Por su parte, en un comunicado oficial, la agremiación detalló: “En Safap desde hace tiempo venimos realizando campaña (no solo internas, sino mediáticas) con nuestros agremiados con relación a los amaños de partidos y las apuestas deportivas. Ellos son conscientes de cuáles son las consecuencias de participar en este tipo de actividades. Saben que pueden sacarlos para siempre del sistema del fútbol”.
El caso surge luego de que el futbolista Mario Tajima hiciera público que el club Academia Cantolao había separado a varios de sus atletas por sospecha de manipulación de resultados en los partidos, a lo que se sumó la solicitud del Pirata Fútbol Club ante la Federación Peruana de Fútbol para que revise el partido en el que cayeron ante Los Chankas por 11 a 0, el pasado 27 de septiembre por el torneo de la Segunda División de Perú.
“Definitivamente existe, yo tengo conocimiento de eso, esto es una mafia que está detrás, yo también cuido por mi familia y mi bienestar. Estamos indefensos ante este tema. Yo pido ayuda no solo al equipo, sino a la FPF, a las personas del IPD y al gobierno”, comentó el mediocampista.
Y agregó: “En el fútbol peruano se sabe que esto es una mafia que está sucediendo hace mucho tiempo. A mí no me corresponde señalar ni sancionar ni mencionar nombres, pero ya es momento que haya un cambio. Ojalá no nos pase lo que pasó en Bolivia. No solamente son los jugadores. Hay gente desde otros lugares que es responsable”.
Tras la información compartida por Tajima, el ex futbolista Víctor Rossel apoyó la denuncia y advirtió que en el fútbol peruano han pasado “cosas extradeportivas inauditas, separaron a jugadores, ni siquiera indisciplinarios, sino extradeportivos en ‘Muni’ y Cantolao. En Cantolao separaron a seis jugadores por temas de las apuestas deportivas”.
Según Tajima, muchos compañeros recibieron ofertas para participar en esta red, y fueron contactados directamente por representantes de esta organización. “A mí no por lo menos, pero sí tengo conocimiento que a muchos compañeros se les han acercado. Eso ya es cuestión de cada uno. Ahí uno tiene que sacar el honor. Debemos hacer un mea culpa y tratar de solucionar entre todos la situación”, declaró.
Por el momento, no ha habido una respuesta oficial de la FPF, algo que se espera ansiosamente en el mundo deportivo del país, pero ya han surgido pedidos de que se suspenda el calendario de la Liga 1 Betsson de 2023 hasta que la Justicia se pronuncie al respecto.
Por su parte, el presidente de la Safap fue categórico: “El comentario de Mario Tajima es preocupante porque esto es un negocio que existe hace mucho tiempo. Lo que quiero que la gente entienda es que esto no es un tema de los jugadores, sino de un sistema que viene atacando hace mucho. El jugador de fútbol en el mundo de las apuestas es solo la puntita de la pirámide invertida que existe en el mundo general de los deportes. Hay investigaciones y sanciones a nivel mundial. Incluso, la INTERPOL ha intervenido para ver cómo hace para desterrar este tipo de situaciones”.
Según Silva Pró, los casos de amaños pueden haber crecido desde que los jugadores ya no están obligados a firmar un contrato en el que se comprometen a no participar de ninguna manera en las apuestas deportivas, y aseguró que si bien todavía no han recibido respuestas de la FPF, se espera que la FIFA avance con el caso.
“También existe un medio de denuncia anónima por la FIFA. Esa denuncia debería llegar a la Gerencia de Integridad y Ética de la FPF, la cual deberá seguir el procedimiento”, sentenció.