Se esperaba que ayer (martes 6) el Senado Nacional de Paraguay aprobara el proyecto de regulación de máquinas tragamonedas, pero los legisladores decidieron posponer el debate para “ajustar detalles” de la propuesta.
La nueva regulación busca limitar la instalación de slots únicamente a casinos y salones exclusivos de juego. Además, las municipalidades en conjunto con la Conajzar tendrían el control total sobre la operación de estos juegos, por lo que se caería la vigencia del contrato altamente cuestionado entre la Comisión Nacional de Juegos de Azar (Conajzar) y la empresa privada iCrop S.A.
Sin embargo, Esperanza Martínez, presidenta de la Comisión del Senado —quien había criticado el acuerdo y había informado que solicitó a la Conajzar que presente un informe sobre la empresa iCrop, para saber “desde cuándo esta empresa actúa, qué capital tiene, qué experiencia tiene”—, exigió que se posponga el debate sobre el proyecto para “consensuar la propuesta con las partes involucradas”.
Según ABC, Martínez explicó que “si bien no está regulado en sitios no exclusivos de juegos de azar, el sector desea operar legalmente y ya no ser ‘sometido al chantaje’ con la nueva regulación impuesta”.
