El estudio de arquitectura y diseño Gensler avanza con el proyecto de Elysium City en Castilblanco, en Badajoz, Extremadura, y proyecta que será un gran impulso para la economía local y la española en general.
La propuesta del desarrollador Castilblanco Elysium Corporation contempla una inversión de más de 18 mil millones de euros en un área de 8,3 millones de metros cuadrados. Una vez terminado, tendrá 18 mil plazas hoteleras, parques temáticos, un lugar para realizar conciertos, zona residencial, entre otras cosas.
Según explicaron, solo durante su construcción se generarán 56 mil empleos directos, mientras que aumentará el número de empleos indirectos cuando ya inicie la fase operativa del Elysium City.
Con estas cifras, Gensler proyecta que el proyecto a gran escala aportará casi el 6 por ciento del producto interno bruto (PIB) anual de Extremadura y casi el 0,3 por ciento del PIB anual de toda España.
De acuerdo con la prensa local, Castilblanco Elysium Corporation estaría en diálogo con siete operadores extranjeros y uno español para ejecutar el desarrollo. Para determinar un socio, esperará a ver cuánta preponderancia tomarán los casinos en Elysium City, ya que, si bien el documento aprobado por la Junta de Extremadura no contempla la construcción de salas de juego, sí están autorizados a instalarse dentro de cada hotel.
Elysium City: primer destino de ocio sustentable
Gensler afirma que Elysium City, como un nuevo proyecto de ocio surgido tras la pandemia, apunta a ser de carbono positivo y pionero en el mundo en su respeto con el medioambiente.
“Elysium City se construirá como una red sostenible de sistemas que maximicen el potencial de los recursos y elimina los residuos utilizando paneles solares fotovoltaicos para la producción de energía y abastecimiento, implementando centros de tratamiento de aguas residuales para regar áreas verdes y producir cultivos locales (agricultura dentro de la ciudad a través de granjas hidropónicas), así como la creación de infraestructura que fomenta transporte público y micromovilidad. Esto servirá para reducir el número total de recursos consumidos, reutilizar los recursos que forman parte de otros procesos y reciclar los que pueden ser utilizados como insumos para otras actividades, creando así un ciclo circular constante que beneficia tanto a la comunidad como al ambiente”, cita al estudio El Economista.
“En general, se espera que el proyecto conserve casi 57 mil toneladas de CO2 por año para generar energía a partir de tres plantas fotovoltaicas en el sitio, así como limitar toda movilidad interna a vehículos eléctricos por horizonte de año”, agregó Gensler.
