Como informó esta semana el Ministerio de Consumo de España, el Consejo de Políticas del Juego ha alcanzado un acuerdo con las comunidades autónomas para “coordinar los registros de personas autoprohibidas de las actividades del juego y apuestas”.
De esta forma, se unificará la documentación de autoexclusión con el fin de proteger a los usuarios con problemas con el juego en todo el país. Además, el Ministerio de Consumo y las comunidades autónomas tendrán mayor poder para coordinar convenios específicos que trabajen con la temática.
Por el momento, el Registro General de Interdicciones de Acceso al Juego (RGIAJ) cuenta con 60.000 españoles inscriptos, que son autoexcluidos del juego online, mientras que cada comunidad autónoma posee sus propios documentos para evitar el acceso a salones de juego presencial por parte de estos usuarios.
“Con el acuerdo alcanzado hoy, cada comunidad autónoma puede optar por integrar su base de datos con el registro estatal o bien interconectar sus registros con el del Ministerio de Consumo, sobre la base del principio de reconocimiento mutuo”, explicaron las autoridades.
Y detallaron: “Con este avance, una persona que se haya inscrito en el registro del Ministerio de Consumo no podrá acceder a portales de juego online, que son de competencia estatal, pero tampoco a establecimientos físicos de juego, que son competencia autonómica. De igual forma, una persona que se haya inscrito en el registro autonómico no podrá acceder a un establecimiento de juego en su comunidad, pero tampoco podrá hacerlo en otra distinta a la suya”.
Por su parte, el ministro de Consumo, Alberto Garzón, celebró que “hayamos apartado diferencias y ofrezcamos una herramienta útil, eficaz, de confianza y de protección global a las personas afectadas por los trastornos del juego y a sus familias. Se trata de poner a las personas que más lo necesitan por delante de la burocracia, siempre desde el máximo respeto de los diferentes ámbitos competenciales”.