La cooperación regional protegerá la integridad del fútbol latinoamericano

El mercado de las apuestas deportivas es uno de los que mayor crecimiento ha registrado en los últimos años en Latinoamérica. Lo cierto es que el deporte y las apuestas se necesitan mutuamente para sobrevivir. Si bien los deportes son independientes de las industrias que lo rodean, el impulso económico que representan los acuerdos con las empresas del juego ayudan a que las entidades puedan seguir funcionando.

Para poder lograr que la industria de las apuestas sea exitosa, y que la integridad del deporte no se vea comprometida, es necesario que cada mercado aplique reglas específicas que guíen tanto a los operadores, como a los clubes y los organismos.

El sistema de monitoreo de loterías GLMS se especializa en detectar y analizar la actividad sospechosa que pueda poner en peligro la integridad de las competiciones deportivas. A principio de mes, antes de la paralización del deporte mundial a raíz de la pandemia del coronavirus, el dueño del club de la primera división de Colombia, Boyacá Chicó, acusó a las casas de apuestas de intervenir en los resultados de los partidos de fútbol. Aunque GLMS y la Federación Colombiana de Empresarios de Juegos de Suerte y Azar (Fecoljuegos) no registraron patrones irregulares durante el partido, estas falsas acusaciones contribuyen a crear y promover una imagen negativa de la industria.

Ludovico Calvi, presidente de GLMS, explicó a SBC Noticias que aquella imagen solamente puede ser mejorada a través de una comunicación extensiva y profesional. “Para poder cambiar la percepción del público es necesario que exista una comunicación temprana. También es importante educar a los atletas, a los empresarios y a los medios de comunicación”, dijo el presidente. Y explicó: “La información es la mejor respuesta que le puedes dar a la comunidad y al público cuando se trata de apuestas deportivas. GLMS trabaja para desarrollar programas de educación y prevención para sus miembros, es una de nuestras prioridades”.

GLMS cuenta con tres centros en Hong Kong, Dinamarca y Canadá que trabajan las 24 horas del día para monitorear las competiciones deportivas en todo el mundo. El sistema de monitoreo tiene un foco “glocal” en el que se utiliza una red internacional a través de sus miembros y socios, pero con conocimiento y experiencia local.

Durante 2019, el sistema de monitoreo de loterías GLMS detectó 59 alertas de patrones inusuales de apuestas en el fútbol de Sudamérica. Sólo 9 de las 50 fueron consideradas sospechosas a través del sistema Green-Yellow-Red, mientras que el resto contó con movimientos inusuales, pero con justificativos.

La mayoría de los países en Latinoamérica se mueven en un mercado con leyes poco claras en cuanto al juego online. Los apostadores tienen acceso a plataformas sin licencia que operan desde otros continentes, y que en muchos casos no ofrecen medidas de seguridad apropiadas. Sin embargo, Latinoamérica no es el área de mayor preocupación en cuanto a amaño de partidos, según GLMS.

“Los casos de corrupción en el deporte suelen cambiar su foco de un lugar a otro en el tiempo. Es por eso que no hay mucha diferencia operacional entre Latinoamérica y otros continentes”, aseguró Calvi, y dijo que “más miembros en la región ayudarían a salvaguardar la integridad ya que la información local es siempre la más valiosa para GLMS”.