Mientras el ministro de Hacienda de Brasil Fernando Haddad impulsó las expectativas de una pronta promulgación de la ley de apuestas deportivas al anunciar el lanzamiento de una medida provisional que regularía el modelo impositivo de la actividad para abril, la Asociación Nacional de Juegos y Loterías (ANJL) reveló también que está trabajando en un documento que podría ser parte del reglamento.
“Queremos regulación y queremos pagar impuestos”, aseguró el director ejecutivo de ANJL, Wesley Cardia, como compartió Folha de S. Paulo. En su declaración, Cardia informó que el documento que preparan establecerá un modelo de recaudación impositiva, junto con requisitos para la venta de permisos de operación, así como reglas para la publicidad en los medios.
Actualmente, la ANJL agrupa a 13 sitios de apuestas deportivas que tienen presencia activa en el mercado publicitario de Brasil, y buscan trabajar directamente con Haddad para la entrada en vigor oficial de la ley de apuestas deportivas, aprobada por el Congreso en 2018 y aún sin vigencia.
Según el director ejecutivo de ANJL, “una preocupación que tenemos es que los impuestos estén equilibrados. Los impuestos excesivos pueden llevar a que las empresas permanezcan en otros países o operen en la clandestinidad, como ocurre actualmente con el mercado de cigarrillos”.
Además, compartió que la asociación ha recolectado datos sobre los sitios activos de apuestas en Brasil, y estiman que son, aproximadamente, unos 3 mil. “Trabajan desde el extranjero, sin garantía de idoneidad. Esto le quita credibilidad a todo el sector. Por eso queremos regulación”, afirmó.
Si bien aún el ministro de Hacienda no ha definido el modelo de impuestos que se aplicará a las apuestas deportivas, desde el gobierno calculan que los porcentajes se fijarán de forma que puedan recuperarse las pérdidas causadas por el aumento en el rango de exención del impuesto a la renta.
Por el momento, solo se informó que se estima que en abril comenzará a implementarse la medida provisional, que establecería un modelo de impuestos de contribución “y no de un tributo”, según revelaron los medios locales.
Asimismo, se ha difundido que la regulación obligará a los operadores con licencia a fijar sus sedes en Brasil para mejorar la fiscalización, la recaudación y el diálogo entre las autoridades nacionales y las compañías de juegos y apuestas.
En este sentido, desde el Ministerio de Hacienda también informaron el impuesto se aplicará sobre el beneficio bruto de las empresas y las licencias de operación, mientras que los jugadores también verán sus premios gravados a través del impuesto a la renta, aunque no se ha decidido cuál será el rango de exención ni el porcentaje que se cobrará en estos casos.
A su vez, como desde el gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva estiman que el aumento en el rango de exención del impuesto a la renta causará pérdidas aproximadas de 3.2 mil millones de reales en 2023, los nuevos gravámenes a las apuestas deportivas podrán compensar los 6 mil millones de reales que se dejarán de recaudar a partir de 2024.
Se espera que tanto los detalles de porcentaje como la modalidad de tributación sean presentados oficialmente después del viaje que el presidente Lula da Silva y el ministro Haddad realicen a China entre el 26 y el 30 de marzo. Por lo tanto, la medida provisional podría entrar en vigor a partir de abril, dado por finalizada la larga espera de la industria de poder comenzar a operar oficialmente en Brasil.
De acuerdo a estimaciones de BNL Data, el grupo brasileño especializado en el mercado de juegos, el sector de las apuestas deportivas regulado podrá generar hasta 12 mil millones de reales en 2023, un aumento del 71 por ciento en comparación con lo generado en 2020, que fue de 7 mil millones.