Bragg califica a su nueva licencia en las Bahamas como una “oportunidad fantástica”

Bragg licencia bahamas

Bragg Gaming Group ha ingresado a Bahamas luego de obtener la aprobación de una licencia para suministrar su contenido y servicios en el mercado regulado local, al cual ha detallado como uno de “alto potencial en el Caribe”.

Luego de haber completado el proceso de certificación de licencia para suministrar su contenido y servicios en Bahamas, los socios operadores del grupo pronto podrán ofrecer títulos de casino online de Bragg de juegos propios y terceros.

Bragg detalló que “la base de jugadores de Bahamas tiene una demografía similar a la de Estados Unidos y Canadá”, mercados a los que espera apuntar más ampliamente en 2022 y donde ya cuenta con solicitudes de licencia en curso en Nueva Jersey, Pensilvania, Michigan y Ontario.

Esta es la más reciente de una serie de autorizaciones regulatorias que recibe la empresa, luego de los lanzamientos en el Reino Unido, los Países Bajos, Grecia, Suiza y República Checa en los últimos 12 meses.

Chris Looney, CCO de Bragg, dijo: “Entrar en Bahamas es una oportunidad fantástica para aprovechar nuestra fortaleza para atraer a diferentes grupos demográficos de jugadores, y destaca la flexibilidad general y el alcance del contenido de nuestro equipo”.

“Esta última adjudicación de licencia promueve nuestra estrategia de crecimiento global, para un mercado que es uno de los varios en los que esperamos estar en funcionamiento en 2022. Estamos ansiosos por comenzar con nuestros socios de Bahamas que pronto anunciaremos”, agregó.

El mes pasado, Bragg elogió el impulso de sus operaciones actuales y dijo que espera superar los ingresos esperados y sus cifras de Ebitda ajustado.

Para el cuarto trimestre de 2021, la empresa prevé percibir 15.4 millones de euros en ingresos y 1.3 millones en Ebitda, aproximadamente.

Como resultado, Bragg espera reportar ingresos para todo 2021 de 58 millones de euros y un Ebitda ajustado de 7 millones, lo que representaría un crecimiento del 25 y 26 por ciento, respectivamente, en comparación con 2020.