El Ministerio de Consumo de España sigue analizando las repercusiones de las “loot boxes”

Desde hace más de un año, el Ministerio de Consumo de España dio a conocer sus intenciones de prohibir las “loot boxes” o “cajas de botín” en los videojuegos, siguiendo “los pasos de Japón y Bélgica”, ya que poseen “características muy similares a los juegos de azar tradicionales”.

Ahora, la Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ) del Ministerio de Consumo informó que el Consejo Asesor de Juego Responsable celebró en la sede del Ministerio de Sanidad una sesión dedicada a estas herramientas de los videojuegos.

Las loot boxes son features aleatorias que los usuarios de videojuegos —en su mayoría, menores de edad— pueden comprar dentro del mismo juego para mejorar las características de sus personajes, adquirir armas, entre otras cosas. 

Así, desde el regulador español consideran que estas herramientas pueden generar adicción entre los usuarios de videojuegos y se busca limitarlas de alguna forma. Por esta razón, representantes del gobierno asistieron a la presentación de D. Leon Y. Xiao, PhD Fellow, Center for Digital Play, de la Universidad de Copenhague, sobre este fenómeno internacional, que está siendo atendido por varias jurisdicciones, pero que especialmente desde España buscan aplicar una regulación “pionera” en Europa al respecto.

Desde la DGOJ indicaron que Xiao “abordó esta temática con una detallada descripción de las características de este tipo de productos, su asimilación desde el punto de vista estructural a los juegos de azar y los principales intentos de regulación a nivel internacional”.

Y continuaron: “El profesor Xiao puso de manifiesto la falta de una regulación efectiva de las cajas botín, la insuficiencia de los mecanismos de autorregulación que hasta la fecha se han puesto en práctica y la necesidad realizar una aplicación efectiva de los instrumentos normativos existentes para evitar los potenciales efectos perjudiciales que de su utilización se pudieran derivar”.

En este sentido, el regulador confirmó que este tipo de conferencias apunta a identificar “algunas posibles medidas alternativas a adoptar por parte de los diseñadores de los videojuegos con cajas botín, así como de los distintos actores implicados para preservar a los menores y a los colectivos más vulnerables de su potencial efecto adictivo”.

Tras una revisión del Ministerio de Consumo el año pasado, se descubrió que el 35 por ciento de los videojuegos y el 55 por ciento de los juegos móviles usan loot boxes para monetizar a los clientes. Si bien no son datos que se han revelado de forma oficial, el ministro Alberto Garzón instruyó al Ministerio para redactar protecciones técnicas sobre cómo evitar que los menores interactúen con las loot boxes.

Algunas de las medidas mencionadas incluyen la prohibición al acceso de los menores a las tiendas de juego donde se pueden adquirir créditos de loot boxes o mismo la aplicación de un sistema de registro que requiera que presenten una identificación para verificar su edad.

Además, se presentarán nuevas reglas con respecto a la publicidad de loot boxes y las promociones en el juego, ya que las reglas del decreto no impedirán que los menores compren o jueguen videojuegos que tengan estas características.