Montevideo refuerza sus políticas de juego responsable en una alianza con la Universidad de la República

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La ciudad capital de Uruguay, Montevideo, ha reforzado su política de juego responsable luego de firmar un convenio con la Facultad de Medicina de la Universidad de la República, que ha hecho una investigación sobre conductas de juego problemático en el país.

Según notificaron a los medios locales, la Intendencia de Montevideo (IMM) siguió el ejemplo del organismo nacional de la Dirección de Casinos del Estado, de unirse con la facultad que ha emitido los resultados de un estudio donde demuestran que “en Uruguay hay más de 35.000 personas que son ludópatas y casi el doble que padece el juego problemático”.

Con el fin de fortalecer su Programa de Prevención y Tratamiento del Juego Patológico, que inició en 2009 brindando asistencia terapéutica sin costo a los apostadores con trastornos de juego problemático, el gobierno nacional firmó el primer pacto en abril de 2023, que ahora será focalizado en Montevideo por parte de la intendencia.

Además, como detallaron, el objetivo es “mantener y mejorar” el programa de la Facultad de Medicina sobre el estudio de comportamientos del juego problemático, “así como realizar actividades de docencia, investigación y extensión a través del Departamento de Psicología Médica en el Hospital de Clínicas”.

Una de las primeras estrategias será promulgar el marco del juego responsable, al mejorar el sistema de autoexclusión de jugadores problemáticos del Casino Parque Hotel.

Por otro lado, la facultad deberá “seleccionar los recursos humanos y proveer los recursos para el desarrollo de la mencionada actividad”, y “promover un abordaje terapéutico individual, grupal y familiar y confeccionar fichas individuales de los participantes del programa, para poder hacer un seguimiento de la evolución clínica y posteriores investigaciones”.

En este marco, también deberá enfocarse en líneas de investigación que “permitan seguir esclareciendo este problema de salud mental y evaluar la marcha del programa para que, al finalizar el año, se pueda llegar a conclusiones científicas sobre la eficacia del mismo”.

Finalmente, tendrá el compromiso de “confeccionar protocolos, historias clínicas, estudios sociales para cuantificar los resultados y realizarlas investigaciones pertinentes”. A esto se suma el requisito de aportarle “perspectiva social” al análisis clínico de cada situación individual.

Como declaró Gerardo Lorbeer, responsable de la Gerencia de Casinos Municipales, “hay operadores que hace más de 30 años están allí. Eso les ha permitido contar con elementos para tener alertas de alguien que conocen. Pero queremos aprovechar este convenio para que la academia nos oriente más firmemente en dónde está la alerta temprana. Hay muchos que conversan, dialogan con los funcionarios y puede ser una vía para que soliciten la autoexclusión y después tratar de acompañarlos. Que puedan seguir siendo clientes del casino sin tener las consecuencias que las mismas personas alertaron”.

Y sentenció: “Lo que nosotros esperamos hacer, primero que nada, es capacitar y sensibilizar a las personas que trabajan en el casino, para que también las personas que sufren ludopatía puedan tener el mejor respaldo”.